Declaraciones de Toni Nadal de hace unos días durante la coferencia
La educación del talento, la disciplina de la superación, en el colegio Nuestra Señora de Europa (Getxo), recogidas por el diario
deia:
"Vamos con ilusión a Wimbledon con la intención de hacerlo lo mejor posible. Confío en que esta derrota [en Halle] no afecte. La realidad es que Rafael llegó muy cansado de Roland Garros, no era fácil después de dos semanas de emociones intensas y de un esfuerzo grande debido a
los problemas que tuvo en la espalda.
Voy a considerar por tanto anecdótica esta derrota".
"
¿Alcanzar los 17 de Roger Federer? La verdad es que no lo sé. Es difícil, ganar cada torneo cuesta mucho y cada año que pasa cuesta más, entonces no sé lo que va a pasar.
Nosotros vamos a intentarlo, no por superar a Federer, sino básicamente por entregarnos a nuestro trabajo, luego ya veremos lo que pasa. Pero no tengo preocupación por eso".
"En la vida las cosas no son fáciles. Cuando tú quieres destacar, cuando quieres ser mejor que los demás nunca es fácil.
Hay mucha gente en el mundo que sabe hacer lo mismo que tú, entonces hay que esforzarse. Hay una dureza propia del calendario, hay una dureza particular de las superficies, sobre todo de las pistas duras, valga la redundancia, y hay una dureza en la cantidad de buenos jugadores que hay, pero es lo que tú has elegido. Es causa-efecto. Si quieres estar arriba, tiene que ser duro. No hay otra opción".
"Rivales como Djokovic o Federer te hacen jugar mejor, te obligan a jugar mejor, pero no te hacen mejor, porque lo que te hace mejor son los títulos y cuando los tienes que compartir con varios, entonces eso no te hace mejor.
En el deporte, no nos engañemos, no es lo bien que tú juegas, es lo mucho que tú ganas. Eso es lo que te da la catalogación de muy bueno. Evidentemente, habría preferido mucho más que Djokovic, Federer, Murray y todos estos no estuvieran por aquí".
"Me sorprende la visión que tiene el mundo de los que destacan, se les idealiza y
parece que uno por pegarle a la pelota es un fenómeno. Es como si yo considerase un fenómeno a mi hijo porque juega al escondite. Para mí, es casi lo mismo".
"Para llegar a ser deportista de élite, no creo que haga falta realizar sacrificios. El deporte de élite exige lo que exige la competición, pero sacrificio lo hace el que sube a un andamio o baja la mina. Sacrificio me parece una palabra exagerada en este caso. En todo en la vida, tú eliges: tienes esa opción o la otra. Si estás en el cine con tu novia, no estás con tus amigos en el bar.
Yo lo que sé es que Rafael es un favorecido, no un sacrificado".
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